El proceso de internacionalización empresarial comienza cuando en la empresa se crean una serie de condiciones precisas que propician la expanción de su negocio hacia el mercado internacional. Abrirse a mercados de este ámbito es cada vez más sencillo gracias a la globalización y a la transformación digital. Sin embargo los mercados de otros paises pueden ser muy diferentes al nacional, por ello hay que medir de forma cuidadosa las ventajas y los riesgos a los que se enfrentan quien decide adentrarse en esta aventura internacional.
La creciente internacionalización de la actividad comercial ha afectado también a la vertiente legal con la conformación de acuerdos, tratados y procesos de integración económica de un verdadero derecho mercantil internacional.
No obstante de esta contratación internacional se derivan una serie de riesgos jurídicos que pueden provenir de la indeterminación de la ley que va a regir el contrato, de la variedad de usos y costumbres aplicables al contrato, y de la indeterminación del modo de solucionar los problemas que se pueden derivar de la relación jurídica. Además de estos riesgos jurídicos, existen también ciertos riesgos tecnológicos, técnicos, comerciales, económico-financieros o políticos que es necesario tener en cuenta.
La elección de la ley aplicable es un aspecto imprescindible en todos los contratos que guardan relación con diversos ordenamientos jurídicos. Es necesario contar con un ordenamiento al que pueden referirse las partes, puesto que la mera voluntad de ésta difícilmente podrá resolver los problemas que surjan en la realidad, máxime una vez que el contrato ya existe y se está ejecutando.
La elección de dicha Ley, no solo tiene relevancia en el plano jurídico, sino que afectará a otras cuestiones no estrictamente jurídicas, entre las que destacan, los riesgos políticos, por ellos siempre que sea posible, ha de elegirse la ley de un país con probada trayectoria de imparcialidad legal que permita que el contrato se desarrolle en un marco regulador claro y estable, sobre todo si se contrata con empresas públicas; los factores linguístico, puede causar la necesidad de traducciones complejas, normalmente juradas, que retrasarán la negociación de contrato y sobre todo su desarrollo y aplicación y ocasiones son extremadamente costosas; los incentivos fiscales, los beneficios fiscales y los incentivos a la inversión extranjeras a las empresas que se establezcan en zona franca otorgados por determinadas naciones pueden ser la única y principal razón para elegir la ley de un país específico.
Es importante asesorarse de manera correcta y establecer mecanismos que permitan enfrentar los imprevistos de manera oportuna y eficaz.
La empresas extremeñas están experimentando un desarollo continuo y progresivo en el aumento de sus exportaciones en los últimos años. Desde diversos organismos institucionales, se apoya a las empresas con programas específicos de internacionalización, al objeto de seguir empujando el auge de estos procesos. Como ejemplo PCTEx- Fundecyt, que pone en marcha el programa P2i que conforman 10 empresas extremeñas de distintos perfiles en pleno proceso de expansión y en el que Bálamo Legal & Fiscal participa como asesores formativos, concretamente el bloque de Mercados externos, legislación, estándares, consultas y normativa europea. En sesiones tanto colectivas como a nivel individual de forma personalizada, acompañamos a las empresas en este complejo pero apasionante proceso de expansión de sus negocios al exterior.